miércoles, 31 de diciembre de 2014

drogas legales

SOCIEDAD Las nuevas drogas
'Legal Highs', las drogas legales que están de moda
·         Se nutren del efecto 'hidra', si una se ilegaliza surgen varias nuevas
·         La lentitud del sistema y la escasa información facilita su consumición
ALBERTO MUÑOZ GONZÁLEZMadrid
Actualizado: 31/12/2014 03:49 horas

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"Hace poco llegó al Hospital del Mar de Barcelona un chico, de unos 25 años, con palpitaciones y taquicardia. Antes de desmayarse, y entrar en parada cardiaca, aseguró a los médicos haber consumido MDMA. Lo cierto es que, cuando se recuperó y nos trajo la muestra a nuestros laboratorios, lo que había consumido era difenidina", cuentaNúria Calzada, coordinadora estatal de Energy Control y reciente ganadora del Premio Reina Sofía Contra las Drogas.
La difenidina es un compuesto muy parecido a la ketamina, pero todavía legal. Provoca unos efectos similares al MDMA, pero con una dosis más baja. Al tomarlo pensando que era éxtasis, el joven barcelonés ingirió varias veces la dosis recomendada para el consumo de difenidina.
Esta sustancia se encuadra dentro de lo que se conoce como nuevas drogas. Se trata de compuestos químicos desarrollados en laboratorios para imitar los efectos de las drogas tradicionales. "Son muy peligrosas porque sustancias como el éxtasis, por ejemplo, han sido legales alguna vez y por tanto han tenido que pasar por pruebas tanto en animales como humanos. Estas nuevas drogas no sabemos qué efectos tienen ni cómo reaccionar ante ellas", explica Núria.
Desde el Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomaníasdependiente de la UE, alertan de la poca información que tienen sobre esta marea de nuevos compuestos; un fenómeno que se ven incapaces de abarcar en este momento.
La peculiaridad de estas nuevas drogas es que cuando una es fiscalizada, es decir ilegalizada, aparecen en el mercado varios compuestos muy similares con otro nombre. Esta nueva sustancia, retocada ligeramente a veces sólo con una molécula diferente, entra en un limbo temporal de alegalidad y el proceso vuelve a empezar. "Cuando fiscalizaron la mefedrona en 2011 aparecieron nuevas sustancias parecidas, y legales, como la butilona, la metilona o la flefedrona", advierte Calzada. En el Informe Mundial sobre las Drogas de las Naciones Unidas del 2013 se señala que "el sistema de fiscalización internacional de drogas se enfrenta ahora a un desafío ante la velocidad y la creatividad de las nuevas sustancias psicoactivas (NPS)".
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Nùria Calzada, responsable de la compañía Energy Control. JOAN MANUEL BALIELLAS
Mayoritariamente, las nuevas drogas se venden en tiendas de internet, aunque también están presentes en algunos grow shops, o establecimientos dedicados a la cultura del cultivo de marihuana, y se pueden conseguir a través de camellos tradicionales. El aumento de las tiendas on line ha sido espectacular. En 2010 eran 170; en 2011, 314; en 2012, 693; y, finalmente, en 2013, 651.
Estas nuevas sustancias se dividen fundamentalmente en dos según su forma de venta al público.
Las Legal Highs, o subidones legales, se caracterizan por tener un envoltorio y nombre atractivo, además de presentarse como la alternativa legal a drogas tradicionales. Las RCs, o Research Chemicals, son, en cuanto a producto, lo mismo, pero se presentan en bolsitas zip con una única referencia a su contenido: la composición química.
Esta distinción hace que se puedan diferenciar los consumidores: los de legal highs son de corte más esporádico y parte de un público inexperto o inconsciente en cuanto a las drogas; los de RCs generalmente son personas que llevan experimentando con drogas durante años y lo hacen con un conocimiento exhaustivo de las mismas.
Las legal highs se enmascaraban al principio detrás de sales de baño o productos de jardinería, advirtiéndose incluso de que no eran aptas para el consumo humano; aunque luego especificaban que, de hacerlo, se debía ser mayor de 18 años. Uno de los ejemplos más claros es el MDPV, también conocido como droga caníbal. Se camufló en un primer momento como producto para el baño, pero ahora ya se vende como legal high bajo el nombre comercial de Ivory Wave. El MDPV ha causado, que se sepa, 99 muertes y 100 intoxicaciones no fatales en Europa.
Ahora, los vendedores de estas sustancias han decidido que ya no tienen nada que temer a las autoridades y publicitan su mercancía real sin ningún complejo. En algunas web, por ejemplo, ofertan productos como "Coca líquida" o "Liquid LSD" con descripciones tan curiosas y directas como esta: "¿No te puedes permitir las rayas blancas? Prueba un efecto como el de la cocaína pero ¡sin sustancias peligrosas!".
Estas tiendas on line no se pueden cerrar ya que lo que venden no es ilegal: "Nos encontramos en un sistema demasiado lento para un mercado tan rápido; siempre van a estar por delante", apuntan desde Energy Control.
Es más, se vende en las webs como una gran ventaja el hecho de que, al no ser ilegales, no puedes ser detenido si te encuentras en su posesión. Además, "al no estar en el sistema, no dejan rastro en aire, sangre u orina, por lo que no dan positivo en los controles de carretera ni en los que se realizan a ex adictos", advertía Núria Calzada en una reciente intervención en el Congreso de los Diputados.
El hecho de que estas drogas no sean detectadas en los laboratorios de los hospitales hace que sea muy difícil conocer exactamente cómo de peligrosas son. "Es posible que esté muriendo gente a causa de estas nuevas drogas y no nos estemos enterando porque se las confunde con las ya conocidas. Necesitamos más información", reclaman desde Energy Control.
Los Mossos d'Esquadra reclamaron recientemente "agilizar" la legislación para conseguir abordar este complejo fenómeno. "Si detenemos a un traficante en la calle, aunque él crea estar vendiendo éxtasis, cristal o speed por ejemplo, nos resulta imposible condenarlo. En el laboratorio nos dicen que no se trata de ninguna sustancia prohibida y lo máximo que podemos hacer es confiscársela para retirarla del mercado", lamentaba recientemente Toni Rodríguez, capitán de la unidad de Crimen Organizado de los Mossos.
A pesar de que se encuentran en ese limbo de legalidad, y de que se publicitan como legales y seguras, las nuevas drogas son tan peligrosas como las tradicionales. De hecho, en algunos casos, lo son aún más ya que sus efectos, reacciones y formas seguras de consumo son desconocidas tanto para las organizaciones médicas y gubernamentales como para los propios consumidores.
Uno de los problemas que presentan estos legal highs es que, en ocasiones, cuando se trafica con ellos en la calle, se presentan como drogas tradicionales. "Si uno piensa que está consumiendo éxtasis, y no un sustitutivo, tomará una dosis que seguramente sea muy superior a la que requieren estas nuevas drogas para provocar sus efectos", declara Núria Calzada, lo que puede llevar a una sobredosis. "El problema es aún más grave si tenemos en cuenta que, cuando llegan al hospital, los médicos no saben qué es exactamente lo que han consumido; confían en que lo sepa el paciente o lleve una muestra encima, pero muchas veces ni siquiera es así", advierte.
A los laboratorios de Energy Control en Barcelona llegan muestras traídas por los propios consumidores; o bien para cerciorarse de que lo que pone en el envoltorio de la nueva droga es lo que contiene o bien porque han intentado comprar alguna droga tradicional pero desconfían, por sus efectos o por su procedencia, de que sea eso realmente y no un sustitutivo.
En internet, para comprobar la procedencia y calidad de estas mercancías, se utilizan páginas web que detallan si quien te lo vende es fiable o un timador. Consiste en introducir el nombre del vendor, o proveedor, dato que tienes que tener previamente para poder consultar la información. Entonces aparece una valoración y una serie de comentarios al respecto del mismo, aclarando si recibes lo que pides o por el contrario te timan.
En los foros de internet, donde los psiconautas, o consumidores expertos, son muy activos, se elaboran exhaustivas listas identificando a los proveedores marcados como timadores. Aquí también se elaboran manuales y consultas sobre cómo se debe consumir correctamente cada sustancia, desde su dosis hasta el tiempo que se debe dejar entre cada toma.
Cada vez son más las nuevas drogas detectadas; según el Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses, en julio de 2012 fueron 251, mientras que en diciembre de 2013 ya eran 348. A pesar del corto periodo de vida de estas sustancias, hace tiempo que han superado en número a aquellas que están fiscalizadas internacionalmente, sólo 234. El Observatorio Europeo advierte de que España es el país en el que más ha aumentado el consumo de estas sustancias: desde 2011 a 2014 se ha triplicado. "Sin un catálogo de sustancias prohibidas bien actualizado nos es imposible perseguir a los traficantes", denuncian desde los Mossos.
En el caso de las Research Chemicals, su venta suele producirse directamente desde laboratorios. También se hace a través de páginas web, pero en este caso la presentación es mucho más discreta. Lo único que aparece como ilustración es la imagen del compuesto químico y su nombre es su formulación. Las nuevas drogas se cocinaban tradicionalmente en laboratorios chinos pero últimamente están proliferando también en Europa del Este.
Para Núria Calzada, la aparición de estas nuevas drogas tienen un por qué:"Si a una persona drogodependiente le dificultas el acceso a sus chutes, buscará otra cosa que meterse". Esto ocurrió por ejemplo en Rusia cuando, al restringirse la heroína, se inventó el Krokodile. Imita sus efectos pero cuesta entre tres y cinco veces menos. Se trata de una mezcla casera, a base de codeína, yodo y fósforo rojo, tan peligrosa que, a parte de gangrenar los miembros de quienes lo consumen, pone la piel verde. Cada año mueren más de 30.000 personas por su culpa en el país.
En el caso de las nuevas drogas, uno de los motivos de su crecimiento ha sido el aumento de las compras por internet, unido a la facilidad para adquirirlas y recibirlas en casa. A parte de que pueden ser compradas con un sólo click, llegan al comprador desde países en los que no están tan perseguidas envueltas en discretos paquetes marrones sin referencias de ningún tipo. También el reducido precio que algunas presentan frente a las drogas tradicionales que imitan es un factor determinante a la hora de explicar su ascenso.
Sin embargo, desde Energy Control no creen que lleguen a desbancar a las drogas tradicionales. "Lo que sí que es seguro es que son drogas que están ahí, ya no son un fenómeno tan minoritario, aunque no las detectemos ni tengamos información sobre ellas. Han venido para quedarse".
6.500 sustancias en un supermercado de la droga de la 'red oscura'
A pesar de que la presencia de nuevas drogas en la web abierta es bastante común, desde la oficina de Naciones Unidas dedicada a las Drogas y el Crimen se destaca el aumento del empleo de la llamada red oscura para la compraventa de estas sustancias. Se trata de un mercado virtual, al que no se tiene acceso buscando en la web, y en el que se realizan todas las transacciones con la moneda digital bitcoin. Ésta se utiliza también en la red normal, de hecho en algunas páginas de Research Chemicals consultadas por este diario ése era el método de pago. La dificultad para los organismos policiales reside en que tanto compradores como vendedores son muy difíciles de identificar cuando realizan transacciones con esta divisa. A parte, protegen sus identidades con complejos métodos informáticos. A pesar de ello, hace un año se desmanteló uno de los mercados más importantes de la red oscura conocido como Ruta de la Seda, donde participaron más de 150.000 internautas durante años con total impunidad. En un periodo de dos a cinco años, en el portal se habían obtenido unos beneficios que rondan los 1.200 millones de euros. En él se vendían todo tipo de mercancías prohibidas, desde armas hasta nuevas drogas, con total normalidad siendo imposible precisar qué porcentaje representan estas últimas en esos enormes beneficios. Eso sí, de los cerca de 10.000 productos diferentes que allí se ofertaban unos 6.800 eran estupefacientes que llegaban a través del correo al comprador, tal y como lo haría un libro o un videojuego por ejemplo. Lo que sí que es seguro es que existe un mercado especializado a nivel mundial y que, tanto el valor de sus transacciones como la variedad en oferta de nuevas drogas, parece estar aumentando.
Consumidores. el experto, el crédulo y el inconsciente

El perfil de consumidor de nuevas drogas no es homogéneo; los expertos realizan una distinción entre quienes saben lo que están tomando y cómo hacerlo y los que no. En primer lugar, el perfil del psiconauta sería el de aquel que tiene una experiencia dilatada con las drogas, estudia concienzudamente sus efectos y contraindicaciones, y se plantea el consumo a modo de experiencia. No se refieren por tanto a volumen sino a conocimiento y experimentación con las mismas. El segundo tipo de consumidor sería el de aquellos que, tanto en tiendas on linecomo físicas, confían en la descripción de legales y seguras que se hace de estas nuevas drogas. Confían en que de verdad estén legalizadas, no que sean alegales como realmente son, y también lo hacen en las descripciones, que proclaman que estas nuevas drogas están compuestas por componentes naturales. El último tipo de consumidor sería el que no sabe que está consumiendo una nueva droga sino que está tomando una tradicional. El primero de los grupos no preocupa a los expertos; se trata de personas que llevan años consumiendo y saben cómo hacerlo. Sin embargo, los otros dos sí, ya que corren el riesgo tanto de verse afectados por una sobredosis como por no ser conscientes de que lo que están tomando no es lo que les están vendiendo. Como toda droga, tienen efectos secundarios adversos, la única diferencia es que al no estar tan estudiadas como otras no se conocen exactamente cuáles son. Es por ello que todos los organismos que han tenido relación con estas nuevas drogas coinciden en una cosa: necesitan más información.

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